miércoles, 18 de marzo de 2009

Lost - Namaste (5x09)

Namaste, como principio del fin de esta temporada, prometía ser un gran episodio, una base sobre la que construír el resto de la temporada. Los que esperaban respuestas se sentirán decepcionados, pero los que esperabamos un gran episodio de Lost a la antigua usanza en el que se abren nuevas tramas, nos hemos sentido muy a gusto viendo el episodio en cuestión.

Repito: no es un episodio de respuestas. Sin duda, rellena algunos huecos que teníamos un tanto oscurecidos, pero no es un Jughead o un This Place is Death, donde las respuestas venían en forma de conexiones entre el pasado y el futuro de una forma magnífica. Lo que tenemos aquí es un episodio muy centrado en la mente de nuestros protagonistas, como era habitual en las primeras tres temporadas, antes de que fuera todo ir corriendo por la selva.

El planteamiento de esta temporada era "Tenéis que volver", y ya se ha cumplido, así que el trabajo de este episodio era dar por zanjada esa idea e ir planteando nuevas tramas y subtramas para que la segunda mitad de esta quinta ración anual de Lost sea tan impresionante como el resto.

Así que, desde este punto de vista, ¿ha cumplido Namaste con su trabajo? Como respuesta, un rotundo SÍ. Dejando de lado la trama conductora del episodio (que era bastante previsible), empezamos a conocer paso a paso a gente de la que sólo habiamos oido hablar o con la que no habíamos tenido mucho contacto. Para empezar, conocemos a...

¡Radzinsky!

En efecto, por fin podemos ponerle cara al antiguo compañero del antiguo compañero de Desmond en la escotilla, del que sólo sabíamos un dato: se voló los sesos y dejó una marca bastante fea en el techo. El tal Radzinsky es el encargado de La Llama, la estación Dharma que se ocupa de las comunicaciones junto al Espejo, y vemos como en su tiempo libre construye ni más ni menos que la maqueta de lo que será la estación de El Cisne, en la que acabará él de una forma u otra. 

En lo que respecta a la trama, lo primero que vemos es como se estrella el avión. Bueno, lo más correcto sería decir que aterriza, y lo hace ni más ni menos que en la pista de aterrizaje que estaban preparando los otros allá por la tercera temporada. Eso y las letritas de "30 años antes" cuando pasamos a las escenas de 1977 nos sitúan definitivamente en 2007, o sea, en el presente.

¿Es cosa mia, o la pista no era tan ancha ni tan larga?
De hecho, los efectos especiales fallan bastante en esta escena  


¿Qué significa esto? Que, como era de esperar, Jack y compañía no solo se habían teletransportado a la isla para no tener que sufrir el aterrizaje, sino que se habían movido en el tiempo, mientras que el avión aterrizaba en la pequeña islita donde se encuentra La hydra... eso sí, con un pequeño desfase temporal también, presuntamente de unas horas: sobre las nubes era de noche y aterrizan de día. En mi opinión, aquí ha ocurrido exactamente lo mismo que pasó con el helicóptero que iba al carguero, que salió al mediodia y llegó a la mañana. 

Mientras tanto, James "Sawyer" LaFleur infiltra a Jack, Hurley y Kate como nuevos reclutas que vienen del oportuno submarino. Para hacerlo, Juliet truca la isla en manos de Amy, que está demasiado ocupada con su bebé, al que han llamado... ¡Ethan! Así qué ahí tenemos al primer conocido de hoy que se nos presenta desde otro enfoque. 

Por cierto, genial el momento de tensión, cuando parece que Kate no está en la lista trucada de nuevos reclutas, y todos creemos que Juliet se la ha jugado... ¡Pero no! Ahí aparece, salvándole el culo. De todos modos, lo que no tiene precio es la cara de Jack cuando descubre que será un simple operario, mientras Sawyer es ahora "el Sr. LaFleur, jefe de seguridad"... ¡las tornas han cambiado, Jack!

¿Operario? ¿OPERARIO? ¡¿OPERARIO?!

En 2007, Frank Lapidus se confronta a Caesar, mientras Ben desaparece sin ser visto... o eso cree. Sun (que por alguna razón no se ha teletransportado junto a sus compañeros) le sigue, y detrás irá el mismísimo Lapidus, al que no se le escapaba una. Ben pretende ir a la isla principal que tanto amamos todos en busca de vete a saber tú qué, y Sun hace como que confía en él sólo el tiempo suficiente; en cuanto encuentran las barquitas para cruzar el charco, le pega un palazo dejándole seco. 

Ben está recibiendo muchas palizas...

Así que Lapidus y Sun se apropian una de las canoas (aun no nos han explicado como es que las otras dos barcas acaban en la playa y los misteriosos ocupantes atacan a Sawyer y compañía, hará ya tantísimos episodios) y cruzan al otro lado, concretamente al mismo lugar en el que se encuentran Sawyer, Jack, Jin y compañía... en otro tiempo claro, pero eso ellos no lo saben. Ahí, en el centro de bienvenida de los nuevos reclutas, se encuentran con alguien de lo más inesperado...  ¡Christian Shepard!

Su silueta ya nos es muy conocida

Entendía que se le apareciera a Jack por ser su hijo y a Locke por ser especial... ¿Pero a Sun y Lapidus? Me da que no está nada muerto, ¿eh? Bueno, el caso es que nuestro amigo Christian informa a la coreana y al piloto de que sus amigos están... en 1977.

"Me temo que tenéis un largo camino por delante"

Y ya casi acabamos. La verdad, ese bien podría ser el final, pero no... ¡Quieren darnos más! Y no nos quejamos. Radzinsky recibe la alarma de 14-J, o sea, en otras palabras, un intruso que ha entrado en el perímetro... ¡y es Sayid! La verdad es que, aun con su pesima actuación de "Soy uno de los hostiles pero de todos modos miro a James y a Jin como si les conociera y me impresionara verles", parece que cuela lo que parece ser la única salida posible a la situación, y nuestro iraquí acaba en una celda en Dharmaville. 

¿Y como acaba el episodio? ¿Así, fastidiando la tranquilidad con la que parecía que iba a ir todo de entonces en adelante? No... Justo después de un magistral cara a cara entre Sawyer y Jack (en el que sale ganando Sawyer, por supuesto; ahora ÉL es el líder indiscutible), vemos como un niño escualido y con gafas lleva un sandwich al preso. De hecho, parece estar más interesado de lo que estaría cualquier otro niño -cualquier otro niño estaría asustado, diría yo- en conocer a un hostil... ¡Y es que se trata del joven Ben! 

La versión malvada de Harry Potter personificada

Por su interés, deduzco que ya ha tenido su conversación con Richard. Pero eso no es importante: lo genial es ese finalazo de "I'm Ben" y la respuesta de Sayid "It's... nice to meet you, Ben", cuando seguro que está pensando "HOLLY FUCKING SHIT!". La que se nos viene encima... 

Las descargas aquí mismo, como de costumbre:

1 comentarios:

MFAL dijo...

No me esperaba un gran capítulo, por lo que me he encontrado con un capítulo excelente.
jeje...todos dicen que Ben se parece a Harry Potter. Algo de verdad hay, pero aun ahi tiene la misma mirada maligna de Ben

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